Descripción del edificio
Si hay un elemento importante y destacable en esta intervención. Uno de ellos es la implantación del edificio en la complicada topografía y desnivel existente en la parcela donde se encuentra esta vivienda. La generación de varios niveles en la vivienda siempre puede generar una sensación de falta de fluidez y escalonamiento que pone en riesgo la sencilla utilización de los espacios
El proyecto se desarrolla en un entorno consolidado y envuelto en vegetación mediterránea. El solar se caracteriza por su diferencia de nivel entre distintos puntos y dicho desnivel es el elemento configurador y favorece la existencia de dos plantas con sus correspondientes espacios exteriores. De este modo la planta principal se vincula con la zona de noche , mientras que la planta inferior se relaciona con los espacios más sociales.
En un terreno con pendiente, forma de abanico, y orientación principal Oeste-este, el programa arquitectónico se resuelve con diferentes volúmenes, que se deslizan uno respecto a otro con la intención de crear la conexión entre interior y exterior en las separaciones, generando una mayor riqueza espacial, iluminación y ventilación, y para marcar la independencia entre los diferentes usos sin perder la continuidad entre ellos.
El proyecto trata de explorar las posibilidades de los distintos volúmenes que conforman la vivienda, tratándolos con dos texturas distintas, la piedra y el blanco.
Dadas las características del terreno y en base a los requerimientos del cliente por tener espacios ortogonales; el proyecto se conceptualizo principalmente como volúmenes prismáticos, escalonados y conectados por el vestíbulo que resuelve las circulaciones. El distribuidor principal es el eje articulador de todo el proyecto, conectando los dos prismas. En la zona central, una pieza recoge el acceso y el distribuidor y marcando la entrada.
En el edificio prima, el empleo de materiales nobles y naturales con un uso tradicional, pero generando volumetría y soluciones contemporáneas destaca sobre todo la implantación del edificio en un complicada topografía, generando una sensación de fluidez en el espacio, así como la ausencia de barreras físicas que de cara al usuario final, era una premisa fundamental.
La presencia de la iluminación cenital como elemento característico y singular del edificio que articula todo el espacio de la vivienda, le dotan de una fluidez y a luminosidad muy mediterráneo, del mismo modo que el resto de acabados y elementos existentes en la vivienda.
El acceso a la vivienda, se produce por el lateral sur, siguiendo la pendiente de la parcela, hasta llegar , a través de la pérgola, al distribuidor principal situado entre la cocina y el salón. Desde el nivel de calle, se podrá acceder directamente a la planta de habitaciones, la entrada se produce a través de un distribuidor que contiene una escalera escultórica que comunica este nivel con el nivel de zona de día.
Las piezas más bajas tienen una única planta, y contienen los usos más públicos de la vivienda, como el salón, el comedor o la cocina, cuyas vistas vuelcan al jardín y a la piscina a través de un gran pérgola. Las piezas más altas tienen dos plantas, con usos privados y estancias más acotadas en el nivel superior, como las habitaciones. Desde las habitaciones principales se accede a una terraza con vista al jardín trasero.
Para la selección de acabados para suelos, muros interiores y muros en fachada se tomando en cuenta los factores estéticos, prácticos y económicos.
Los espacios exteriores son tratados como parte de la casa, conectando por completo el exterior con el interior. Los materiales utilizados son, la piedra natural, los estucados blancos, la madera en carpintería y el azul del mar en la piscina. Los grandes muros de mampostería actúan como nexo de unión con el terreno.