Los valores de la Huerta de Valencia son agrarios, ambientales, culturales, paisajísticos y agrarios, y dentro de los valores, se encuentra el de patrimonio arquitectónico de la Huerta de Valencia. Este patrimonio está integrado entre otros, por las construcciones de habitación, resguardo y almacenamiento, entre otros y en particular las casas, alquerías, barracas de la Huerta y secaderos de chufas.
Paralelamente al desarrollo de los campos de cultivo, se desarrollaron las acequias para el regadío.
Por otro lado, cohabitaban diversas construcciones típicas en la huerta valenciana debido a la peculiaridad del terreno. Pero, la principal vivienda en la huerta es la Alquería o Casa, aprovechando el curso de las acequias y otras simplemente dejadas perder pudiéndose observar en ellas el deterioro del transcurso de los años.
El objeto del proyecto es llevar a cabo una rehabilitación de esta vivienda, casa a l ́Horta o Alquería El Trull en Alboraia. Como se ha indicado, la casa esta compuesta de varios volúmenes, un primer volumen a dos aguas recayente hacia Levante, otro segundo volumen con aguas hacia el sur, generando varios testeros y encuentros algo complejos que han generado problemáticas de filtraciones, y un último anexo a la vivienda, queda orientado hacia Norte, protegiendo el testero existente con mayor problemática de filtraciones, todo ello en un conjunto unitario, indisociable.
La restauración, puesta en valor y reúso de este interesante ejemplo de arquitectura tradicional valenciana, reforzará y complementará el legado histórico de Alboraya, al tiempo que contribuirá a la revitalización de su entorno de Huerta.
La rehabilitación que se realizará y se adecuará al ambiente de huerta en el que se ubica y a la función que le es propia, para recuperar su valor paisajísitico y arquitectónico.
El objetivo fundamental del proyecto de rehabilitación es mantener el espíritu de la casa antigua, poniendo en valor sus elementos más característicos, y al mismo tiempo incorporando elementos contemporáneos (avances tecnológicos) para conseguir el confort de la vivienda. Una intervención que pretende ser sensible y respetuosa con el valor histórico de las preexistencias, y que al mismo tiempo quiere garantizar la calidad del hábitat, partiendo de un buen diseño bioclimático, y con criterios ecológicos y de eficiencia energética.
Por otra parte y desde un punto de vista estrictamente arquitectónico el criterio general de la intervención estará basado en la Conservación, es decir, se parte de la base del intento de recuperación de todos los elementos (ya sean funcionales, constructivos o estructurales) mediante tratamientos específicos que a lo largo del proceso de restauración vuelvan a proporcionar el grado de consolidación y resistencia precisas para la función que deben desarrollar, sin que se vea alterado su aspecto general y concepción original. Por otra parte, la reconstrucción de la cubierta y parte de los muros del volumen lateral, se justifica mediante la pervivencia de elementos originales que aportan datos esenciales y significativos para el resto de la restauración y conocimiento documental de lo perdido. La reconstrucción procurará, en la medida que las condiciones técnicas lo permitan, la utilización de procedimientos y materiales originarios.