El proyecto contempla la rehabilitación y renovación de una casa enclavada en el conjunto de la Alquería del Pi, en L’Horta Nord, en un ámbito resiliente como es la huerta. El edificio objeto de este rehabilitación data de finales del s.XIX, aunque existen elementos que, forman parte del conjunto que está declarado BRL,(Bien de Relevancia Local) y que son del siglo XIII.
Si hay algo característico de esta vivienda, al menos en sus fachadas y elementos más visibles de sede la huerta es que sus muros están construidos con piedra vista, tiene un carácter diferenciado del resto del conjunto, desde sus orígenes y es lo que hemos preservado en la actuación que hemos realizado.
El objetivo de la rehabilitación es mantener el espíritu de la casa de huerta poniendo en valor sus elementos tradicionales más característicos, incorporando elementos contemporáneos para conseguir el confort de la vivienda, realizando un intervención que pretende ser sensible y respetuosa con el valor histórico de las preexistencias, y que al mismo tiempo quiere garantizar la calidad del hábitat, partiendo de un buen diseño bioclimático, y con criterios ecológicos y de eficiencia energética.
Se adecua la distribución interior de la vivienda a las necesidades de sus actuales habitantes, estableciendo un programa completo de vivienda actual y funcional, pero sin perder la esencia original, con espacios claramente definidos, pero mucho más diáfanos y luminosos. Esta vivienda planteaba varios desafíos a resolver, que era el deficiente estado de conservación de una de las alas del edificio, lo que obligó a la sustitución de algunos cerramientos por los actuales, pero incorporando acabados que fueran respetuosos con las partes originales del edificio. Otra de las problemáticas es el elevado nivel de humedad en las edificaciones existentes en la huerta, para la cual se han dispuesto varios sistemas de control, desecación y aireación de forma pasiva que lo minimizan. Y por último, el tratamiento de las aguas , el cual es fundamental en este tipo de viviendas, las cuales exigen cumplir con el ciclo integral del agua sin afección al medio ambiente.
El patio cobra protagonismo y vida, y sobre él vuelcan los espacios principales de la vivienda. Hemos proyectado la vivienda, del habitante de la huerta, de tal modo que no sufra las carencias que en muchas ocasiones padecen estas viviendas, como el nulo aislamiento, la ausencia de climatización, la elevada humedad, con las mismas dotaciones y confort que puede poseer una vivienda en cualquier lugar, de tal modo que el habitante de la huerta tenga el mismo confort en su vivienda que el que vive en una vivienda unifamiliar o un edificio de viviendas actual, pero con una calidad de vida y unos valores paisajísticos y medioambientales mucho mayores al encontrarse en plena huerta.
Nominada a nivel mundial a mejor obra arquitectura 2025.
Nominada a nivel hispanoamericano a mejor obra arquitectura 2025.